Todo 11 tiene su 13: El glorioso y bravo Pueblo junto a la Fanb rescataron la dignidad de la nación

Publicado: 13/04/2021 07:00 AM

El 13 de abril de 2002 el pueblo venezolano salió a las calles de diversas ciudades, frente a los cuarteles y unidades militares, y con un solo grito: "¡Queremos a Chávez!", exigió la liberación del Comandante Supremo Hugo Chávez, quien se encontraba secuestrado tras haber sido víctima de un golpe de Estado por parte del imperialismo y la derecha.

Estas protestas que poco a poco crecían en número de participantes y que igual se iban desplegando en ciudades y poblados de todo el territorio nacional, fueron objeto de la mayor operación de silencio informativo que se hubiese conocido hasta ese día.

Ante esto, un grupo de venezolanos obedeciendo a su espíritu de combate, decidió dirigirse a las sedes de los medios de comunicación, para exigir que se informara sobre las concentraciones que el pueblo desarrollaba en todo el país para exigir el fin de la dictadura de la derecha y la restitución del Gobierno del presidente Hugo Chávez.

Esta expresión de deseo de visibilización del pueblo, intentó ser reseñada por los medios como "ataques" de "hordas", en su búsqueda de justificar acciones de fuerza por parte de la recién instalada dictadura, que debido a su aéreo poder, se mantuvo en un gigantesco silencio hasta que aproximadamente a las 4:00 pm se suscita la llamada del autoproclamado  Pedro Carmona Estanga, en declaraciones a CNN.

“No hay ninguna situación anormal. Junto al Palacio de Miraflores, grupos muy pequeños, bueno quisieron indicar la preocupación que tenían, por la suerte y destino del presidente Chávez, expresar algunas preocupaciones, pero la situación es normal en las inmediaciones del Palacio de Miraflores”.

Con estas declaraciones Carmona, pretendió silenciar el contragolpe que gestaba el pueblo que se agolpaba frente a Miraflores para exigir el retorno del Comandante Chávez, acción que al igual que en las unidades militares, fue apoyada por apoyada por los miembros de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (Fanb) que se encontraban en la sede del Ejecutivo nacional.

En medio del despliegue de los militares, los golpistas que se encontraban dentro de Miraflores emprenden una veloz huida dejando a su paso, zapatos, carpetas y entre otras cosas, su glamour al ser grabados por periodistas que se encontraban dentro dentro del la sede del Ejecutivo a la espera de los primeros "decretos" del "Gobierno de transición", evidenciando así el fin del sueño dictatorial de la derecha en Venezuela.

Ya entrada la noche y luego de haberse suscitado la retoma de Miraflores y el desconocimiento de la dictadura por parte de la Fuerza Armada, Diosdado Cabello, quien ejercía la Vicepresidencia Ejecutiva de la República, arriba al Palacio de Miraflores, donde fue juramentado por el presidente de la Asamblea Nacional, William Lara, para que ejerciera la jefatura de Estado como Presidente Temporal, hasta que se suscitara el retorno del Comandante Chávez.

"¡Vamos a rescatarlo!", fueron las palabras de Cabello tras haberse juramentado, orden que fue ejecutada por un grupo de militares venezolanos patriotas que iniciaron la Operación Rescate de la dignidad, que tenía como objetivo, el salvamento y retorno del Primer Mandatario.

Mientras se ponía en ejecución esta operación, millones de venezolanos seguían en las calles junto a su fuerza armada, celebrando esta victoria sobre el imperialismo y esperando entre llantos de alegría, cantos, consignas y mucha algarabía el regreso del Comandante Chávez.

A 19 años de ese día glorioso en que Pueblo y Fuerza Armada unidos rescataron la dignidad de una nación determinada a ser libre, el país levanta las banderas de la unión cívico-militar para seguir defendiendo a la Revolución Bolivariana.