A 100 años de la Revolución Rusa: Nueva esperanza y nuevo orden histórico



Publicado: 06/11/2017 02:50 PM

El próximo 7 de noviembre se conmemora el centenario de la Revolución Rusa, también conocida como la Gran Revolución Socialista de Octubre o la Revolución de Octubre, un acontecimiento clave no solo en la historia de ese país, sino también en el ámbito mundial.

Los gigantescos acontecimientos que tuvieron lugar en Rusia entre febrero y octubre de 1917 conmocionaron al mundo entero porque fueron la demostración que los campesinos, los trabajadores, el proletariado, los pobres de Rusia podían desprenderse de 300 años de opresión y humillación zarista, y acabar con el poder de la burguesía y los terratenientes, pasando a establecer las bases para una nueva sociedad.

Aunque la Revolución Rusa ocurrió el 25 de octubre de acuerdo al calendario juliano (estilo antiguo), vigente en aquel año, pasó a celebrarse el 7 de noviembre debido a que en 1918 los bolcheviques (comunistas) adoptaron oficialmente el calendario gregoriano (estilo nuevo).

La Revolución Rusa ofreció un camino de desarrollo alternativo muy distinto al del capitalismo liberal. La gesta histórica permitió a Rusia alcanzar avances prodigiosos en lo político, social, cultural, económico, militar, científico, entre otras.

Con motivo de la celebración del centenario de la Revolución Rusa, Con el Mazo Dando le estará presentando tres entregas, donde se describirán las causas y consecuencias de esta importante fecha, así como los cambios que este hecho histórico produjo en el mundo.

La Revolución de Febrero

La Revolución de Febrero en el imperio ruso marcaría la primera etapa de la Revolución de Octubre de 1917, para aquel entonces Rusia se encontraba sumida en una terrible crisis, producto de la autocracia del Zar Nicolás II.

En agosto de 1914 el Zar Nicolás II lanza a su pueblo a la guerra contra Alemania y Austria-Hungría, sumándose así a ser parte de la Primera Guerra Mundial. Se estima que movilizó unos 15 millones de hombres para la contienda, dejando de esta forma un número insuficiente de trabajadores en las fábricas y las granjas, que posteriormente ocasionaron una escasez generalizada de alimentos y materias primas.

Las tropas del zar, mal alimentadas, deficientemente equipadas, dirigidas por oficiales incompetentes e integradas en su mayoría por campesinos reclutados contra su voluntad, sufrieron sistemáticas derrotas de manos de los alemanes, reseña http://www.claseshistoria.com. Esta guerra le dejaría a Rusia 2 millones de muertos y 5 millones de heridos, señaló por su parte en junio de 2014 http://www.ellitoral.com.ar.

La participación de Rusia en la Primera Guerra Mundial ocasionó grandes penurias en la población, que también debió enfrentar la negación del Zar a otorgar reformas políticas liberalizadoras, así como la explotación de la que eran víctimas los trabajadores quienes laboraban más de 14 horas al día con bajos salarios y condiciones de salud y seguridad de trabajos precarios. A lo anterior hay que sumar el fuerte desabastecimiento que reinaba en el país.

Es así como el 23 de febrero de 1917 (calendario juliano), Día Internacional de la Mujer (8 de marzo por el calendario gregoriano) se lanzaron a las calles de San Petersburgo miles de mujeres al grito de “paz y pan” ante el desabastecimiento general de la ciudad.

La huelga se confunde con un levantamiento de masas contra el régimen. Los regimientos acampados en la ciudad se adhieren al levantamiento, en lugar de reprimirlo. Cinco días después el zarismo no existía más, reseña http://www.po.org.ar/prensaObrera/1448/aniversarios/la-revolucion-de-febrero.

El 27 de febrero se constituyó un Gobierno Provisional presidido por el príncipe Luov con Kerensky como ministro de Guerra y de Justicia. Nicolás II, que se había trasladado al frente para dirigir las tropas, abdicó el 3 de marzo, falto del apoyo del ejército, refleja http://www.claseshistoria.com.

La caída del zar vino seguida de un Gobierno provisional, al mando de Aleksandr Kérenski y un grupo de mencheviques (la clase burguesa, los profesionales y la monarquía moderada), que no respondió a las expectativas comunitarias. El nuevo Gobierno optaba más por la continuación de un sistema en base a una administración diferente que por la reformación de las estructuras, refirió en abril de este año telesurtv.net.

En otras palabras, la paradoja de febrero es que las masas derriban al zarismo y el poder termina en manos de la burguesía liberal.

Lenin y Trostky los grandes protagonistas

Tras enterarse de la noticia de la Revolución de Febrero, Lenin decide regresar a Rusia, creía que cada minuto que pasaba y que se demoraba en su retorno era tiempo perdido para la revolución, reseña laizquierdadiario.com/El-regreso-de-Lenin-a-Rusia-luego-de-diez-anos-de-exilio.

El 9 de abril de 1917, un tren esperaba su salida de la estación de Zúrich, Suiza, en dirección a la frontera alemana. A bordo viajaban Vladimir Ilyich Ulyanov, más conocido como Lenin. Su destino final: Rusia. Lenin regresaba a su país después de 10 años de exilio. Junto a él viajaban otros 31 revolucionarios, recordó en abril de este año http://www.bbc.com.

El domingo 15 de abril, Lenin le envió un telegrama escueto a su hermana, que se encontraba en San Petersburgo (conocida en aquella época como Petrogrado), pidiéndole que le informara al periódico oficial bolchevique de su llegada inminente.

La noticia de la llegada de Lenin corrió como la pólvora y las autoridades locales prepararon un recibimiento masivo. Ya en San Petersburgo, sobre el andén, Lenin pronunció un discurso clave para entender el devenir de Rusia, agrega la citada fuente.

"El pueblo necesita paz, el pueblo necesita pan, el pueblo necesita tierra. Y ellos le dan guerra, hambre, no pan y dejan a los terratenientes con la tierra. Debemos luchar por la revolución social, luchar hasta el final, hasta la victoria completa del proletariado. Larga vida a la revolución social internacional", dijo Lenin, cita http://www.bbc.com.

Unos días después, Lenin desarrolló estas ideas en sus Tesis de Abril que, según los historiadores, servirán de hoja de ruta para la Revolución de Octubre, agrega el citado medio.

Por su parte, León Trotsky llega a Rusia en mayo de 1917 luego de 12 años de exilio por el mundo. Lo primero que pregunta es qué posición tenía Lenin y le informan de la orientación que éste le imprime al Partido Bolchevique, bajo la consigna ¡Todo el poder a los Soviets!, (entendiéndose por Soviets consejo obrero de trabajadores).

La confluencia entre ambos se da en torno a la estrategia; es decir unir a los trabajadores con los soldados –de origen campesino- y plantear que la resolución íntegra y efectiva de las demandas no vendría de la mano de una Asamblea Constituyente democrático burguesa, sino de un gobierno obrero y campesino, publicó el 25 de octubre de 2016 http://www.laizquierdadiario.com/Trotsky-el-temple-de-Octubre.

Las Tesis de Abril de Lenin, acerca la posición del grupo de Trotsky con la política bolchevique justo en el momento crítico. Lenin dice que desde que Trotsky comprendió la necesidad del partido revolucionario “no hubo mejor bolchevique que él”, agrega la citada fuente.

La Revolución de Octubre ha llegado

El gobierno provisional que se instauró en Rusia tras la Revolución de febrero no detuvo la guerra ni adelantó la reforma agraria. La situación económica y social continuó deteriorándose. En julio de 1917 los monárquicos protagonizaron un intento de golpe de Estado. El comandante jefe del Ejército ruso, Lavr Kornilov, envió regimientos de cosacos a Petrogrado para destituir el Gobierno provisional y disolver los sóviets (consejos). El intento de golpe fracasó pero el Gobierno provisional lo utilizó como pretexto para a su vez disolver los sóviets, establecer la pena capital en el Ejército y en la Marina de guerra y emprender de nuevo las ofensivas en los frentes, reseña http://rusopedia.rt.com.

Los bolcheviques (la clase media trabajadora, en su mayoría obrera) pasaron a la clandestinidad pero no abandonaron los preparativos para la toma del poder. Para el comienzo de otoño los bolcheviques y sus aliados, los socialistas revolucionarios, eran la principal fuerza opositora capaz de organizar la nueva revolución, esta vez bajo consignas socialistas. Uno de sus lemas principales fue el fin de la guerra, agrega la citada fuente.

 El 24 de octubre el Comité Revolucionario Militar, presidido por Lev Trotsky, ejecutando el plan de Lenin, mandó a los destacamentos de los marineros de la flota del Báltico y a los guardias rojos a ocupar estaciones ferroviarias, correos y telégrafo centrales, estaciones telefónicas, bancos y puentes levadizos. Los insurgentes no encontraron resistencia organizada. La guarnición militar de la ciudad mantuvo la neutralidad o se unió a la revolución, describe la citada fuente. En la noche del 24 al 25 de Octubre, los bolcheviques toman el poder sin derramamiento de sangre. El gobierno, o lo que queda de él, se atrinchera en el Palacio de Invierno. Pero el crucero Aurora desde el río Neva lo bombardea con salvas de cañón sin munición, lo que es suficiente para que sean rápidamente derrotados. Kerensky escapa hacia el extranjero, narra http://www.laizquierdadiario.com/Trotsky-el-temple-de-Octubre.

La Revolución Rusa ha triunfado, abriendo una nueva era en la historia de la humanidad. Pronto Lenin aparece en público junto a Trotsky en el soviet proclamando el triunfo y entregando todo el poder a los soviets (Consejo obrero de trabajadores). Mientras tanto redactan en una pequeña hojita y en lápiz los primeros decretos revolucionarios dando por satisfechas las consignas de “¡Paz, Pan y Tierra!”, señala el citado medio.

¿Qué pasó después?

Después de la victoria de la Revolución de Octubre, Vladimir Ilích más conocido como Lenín, y el gran estratega de esta gesta histórica quedó al frente del nuevo gobierno; mientras que León Trotsky encabezó la comisaría de relaciones exteriores y Iósif Dzhugashvili, el nombre real de Stalin, se ocupó de las minorías étnicas, reseña http://rusopedia.rt.com.

El segundo Congreso de los Sóviets de los Representantes de Obreros y Soldados de Rusia, aprobó la paz que suspendió unilateralmente la participación de Rusia en la Primera Guerra Mundial y propuso a Alemania un tratado bilateral. De esta manera el nuevo poder soviético rompió la Triple Entente —unión militar y política con Francia y Gran Bretaña—, dentro de la cual estuvo combatiendo contra Alemania y el Imperio austro-húngaro durante la Primera Guerra Mundial, agrega la citada página.

El nuevo poder soviético aceptó la pérdida de enormes territorios ocupados por el Ejército alemán. La paz fue firmada en la primavera de 1918 en la ciudad bielorrusa de Brest-Litovsk. En el tratado , Rusia renunciaba a Finlandia, Polonia, Estonia, Livonia, Curlandia, Lituania, Ucrania y Besarabia, que a partir de entonces quedaron bajo el dominio y la explotación económica de los Imperios Centrales, refleja http://ghescuela.blogspot.com.

Durante el Segundo Congreso de los Sóviets también se aprobó el Decreto de Tierra, que abolía la propiedad de los terratenientes, la cual pasaba a manos de los consejos para que la distribuyeran entre los campesinos. En total los consejos obtuvieron unos 150 millones de hectáreas. El Decreto de Tierra fue una de las medidas más importantes que aseguró a los comunistas el apoyo sólido del sector agrícola y, por consiguiente, la victoria en la guerra civil de 1918-21, destaca http://rusopedia.rt.com.

Por su parte la dirección de las fábricas pasó a manos de los comités de obreros que, en primer lugar, legalizaron la jornada laboral de ocho horas, agrega la citada fuente.

En los días y años posteriores se promulgaron diversos decretos que cambiaron el régimen económico, político y social del Imperio ruso. Tras el triunfo de los bolcheviques en la guerra civil rusa (1921), en diciembre de 1922 se creó la Unión Repúblicas Socialistas Soviéticas (abreviado: URSS, o Unión Soviética), integrada por Rusia, Ucrania, Bieolorusia y Transcaucasia (Georgia, Azerbaiyán y Armenia) con capital en Moscú. En 1924 se adhirieron Uzbekistán, Turkmenistán y Kirguistán y en 1929 Tadzikistán, refiere http://www.claseshistoria.com/revolucionrusa/urss.htm.

La Revolución Rusa fue la primera que ganó el proletariado, pues hay que recordar que la francesa (1789) dejó intacta la propiedad privada capitalista de los medios de producción como sistema económico imperante. La Revolución de Octubre fue la prueba tangible que necesitaban los trabajadores, el proletariado, los pobres de la tierra para estar seguros de que el sueño de Karl Marx no era irreal.

YULEIDIS HERNÁNDEZ TOLEDO

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