Carlos González Bogen honra lo mejor de la faena ecuestre en las plataformas del MAO

Publicado: 27/08/2020 01:18 PM

Las faenas campestres han servido a lo largo de los años como musa e inspiraciçon de las más originales y únicas muestras de arte de consagrados y noveles artistas plásticos, por lo que en 1984 el litógrafo venezolano oriundo de Upata, Carlos González Bogen, realizó una pieza titulada "Ronda Ecuestre", trabajo que exhibe una típica escena de las actividades llevadas a cabo por los campesinos de la época en territorio nacional y que ha sido elevada a las redes sociales y plataformas digitales de la Fundación Museos Nacionales (FMN) y del Museo Alejandro Otero (MAO), respectivamente.

Esta litografía blanco y negro de 57 x 76,6 cms, retrata un recorrido a caballo de dos jornaleros del llano venezolano, en una típica etapa de las labores de producción agrícola y ganadera desarrolladas en Venezuela. Esta obra de González Bogen viene a formar parte de "Conoce tu Patrimonio", programa de la grilla digital de la FMN para este lapso de cuarentena social desplegada en el mundo por el nuevo coronavirus Covid-19. 

De acuerdo con la clasificación y perspectiva del Departamento de Investigación del Museo Alejandro Otero, Carlos González Bogen es un indiscutible representante de la tendencia constructivista y figurativa en el arte criollo, pues este baluarte se paseó en estas lides al formar parte vital de la consolidación de la Ciudad Universitaria de Caracas y el Centro Simón Bolívar, ambos complejos ubicados en la ciudad capital. 

"González Bogen es una figura fundamental para entender la ambivalente relación entre el constructivismo y la figuración en Venezuela. Ya desde los años cincuenta participaba en proyectos de integración de las artes, como la Ciudad Universitaria de Caracas o el Centro Simón Bolívar", explicó Richard Aranguren jefe del Departamento de Investigación del MAO. 

Por otra parte, González se adhirió a la zoología como una rama de inspiración que dio rienda suelta a esta tendencia en su quehacer artístico autóctono y rupestre y en su faceta arquitectónica, en la que usó además figuras geométricas como elementos decorativos y complementarios de sus obras. 

"Retomaba temas folclóricos en los cuales predominan las figuras zoomorfas, como en la serie de murales integrados a la arquitectura, desarrollados a partir de los años sesenta y setenta; diseños que mezclan elementos geométricos y figurativos en armoniosa convivencia", matizó Aranguren.

Este intervalo de confinamiento social preventivo por el Covid-19 ha sido aprovechado por el tren directivo del Museo Alejandro Otero para destacar lo mejor de nuestra cultura y venezolanidad a través del arte y los hacedores criollos a lo largo de nuestro devenir artístico dentro y fuera de las fronteras de la nación. 

PRENSA FMN