Publicado: 18/09/2024 10:00 PM

(Fantoches, 9-10-37 + El Nacional, 9-9-73 y 14-11-84)

En varios momentos de nuestra historia contemporánea se ha podido documentar la existencia de movimientos nazifascistas en Venezuela. El primero de ellos se identificó visiblemente con los actos vandálicos de un grupo de seguidores del franquismo español:

• El 9 de octubre de 1937, un grupo de camisas negras, integrantes del grupo político pro falangista Unión Nacional Estudiantil (UNE), asaltó las oficinas del semanario FANTOCHES, propinándole una brutal paliza al humorista, poeta y dramaturgo, Leoncio Martínez, que casi acabó con su vida.
• Los desenfrenados fascistas estaban comandados por un joven llamado Rafael Caldera, y a su paso destruyeron todas las instalaciones, dejando casi moribundo en el piso a Martínez.
• El luchador democrático, Leoncio Martínez, había publicado, para aquel entonces, una serie de caricaturas y reportajes antifascistas, denunciando, entre otras cosas, la muerte del joven miliciano venezolano Oscar Pantoja Velásquez, quien cayó defendiendo las filas republicanas en Madrid, contra los gorilas de Francisco Franco.
• Víctima de las secuelas de esta salvaje golpiza, Leoncio Martínez, falleció prematuramente pocos años después, el 14 de octubre de 1941, después de haber seguido publicando ininterrumpidamente su semanario cargado de fino humor, sátiras políticas, y denuncias contra los facciosos que emergían en varias ciudades del país.
• Aquel día del asalto a FANTOCHES, toda Caracas vio a Rafael Caldera haciendo el saludo fascista a brazo alzado junto con otros 20 miembros de la UNE, mientras cantaban uno de los himnos de la Falange Española: “Cara al Sol”.
• Cualquier parentesco con la “Kristallnacth” (Noche de los Cristales Rotos), llevada a cabo contra comunidades judías por tropas de asalto nazi**,** y ****ocurrida entre el 9 y 10 de noviembre de 1938, no es mera coincidencia.
• Poco después, otro joven, Rómulo Betancourt, organizó los primeros cuerpos paramilitares de asalto (bandas armadas de AD), cuyas acciones violentas quedaron plasmadas en todos los periódicos durante el golpe de Estado del 18 de octubre de 1945 contra el presidente constitucionalmente electo, Isaías Medina Angarita. Las bandas armadas de AD, constituidas en un aparato especial de acciones de sabotaje, vandalismo y violencia, funcionaron a las órdenes de Betancourt y Carlos Andrés Pérez hasta 1969.
• Estos rostros visibles del fascismo dieron origen a 40 años (1958-1998) de políticas de Estado, dentro de cuyo período nacieron otras organizaciones de inspiración falangista y/o variantes de Copei: Tradición Familia y Propiedad, Primero Justicia, Voluntad Popular y Vente Venezuela, cuyas caras visibles hoy vemos.
• En ocasión de algunas entrevistas dadas por el Dr. Caldera para tratar el escabroso asunto de los abusos policiales cometidos por el gobierno de Betancourt, declaró la siguiente perla: “Una tortura es aquella que se aplica durante largo tiempo, y por lo cual no debía dársele el calificativo de torturas a los golpes al estómago, palizas con mangueras, planazos, cachiporrazos, bofetadas y corrientazos eléctricos; como tampoco sentar a los presos esposados en una silla o panelas de hielo durante quince días, ni recibir culatazos ni golpes en la cabeza”.

EL CONTEXTO:

• Leoncio Martínez “LEO” es considerado como la conciencia humorística de Venezuela durante las décadas de los años 20, 30 y 40 del siglo pasado. Un Voltaire del periodismo que supo romper con su lápiz los vicios del sistema de una sociedad cargada de odios raciales, sociales y políticos. Desde su tribuna FANTOCHES, lanzó la primera campaña de la Lucha Antifascista de la que se tenga conocimiento en la historia del país, lo cual le acarreó una severa golpiza propinada por los representantes del nazifascismo criollo que albergaba a conspicuos representantes de la oligarquía feudal de entonces. Nació en Caracas el 22 de diciembre de 1989 y falleció en la misma el 14 de octubre de 1941, luego de haber sentado cátedra de buen humor como arma de la alegría, inexpugnable instrumento contra los monstruos de la violencia de los poderosos contra los pobres. LEO es, sin duda, el padre del humor político de nuestra tierra.
• Eran los días de la Guerra Civil Española (1936-1939) y la subsiguiente II Guerra Mundial (1939-1945), cuando las fuerzas del Eje nazifascista (Italia, España, Japón y Alemania) pusieron sus ojos sobre la posición estratégica, los recursos energéticos y la situación geográfica privilegiada de Venezuela.
• Las costas venezolanas fueron escenario del hundimiento de más 74 tanqueros de crudo y 4 submarinos alemanes.
• En tierra firme aparecieron las asociaciones políticas y culturales de corte nazifascista de variada índole; entre las cuales figuraron la UNE, que más tarde pasaría a constituir Acción Electoral, para luego transformarse en el Comité Organizado Electoral Independiente (Copei).
• De aquellas agrupaciones de ultraderecha, que entonaban los himnos de Hitler y Mussolini, a las bandas armadas de AD, a Tradición Familia y Propiedad, y así hoy tenemos diferentes nomenclaturas con los mismos signos del odio visceral contra el bolivarianismo: Primero Justicia, Voluntad Popular, Vente Venezuela y afines. El monstruo cambia de piel más no de proceder.
• El capitalismo neoliberal ha engendrado nuevas expresiones de la violencia de las clases dominantes frente a movimientos de transformación social promovidos por nuevas fuerzas revolucionarias.
• Esto siempre ha existido con la desigualdad social. Son expresiones que se sitúan en la necesidad de un orden individualista, no colectivo ni menos aún comunal.
• Pertenecen a sectores privilegiados de la sociedad, serviles y genuflexos, a las órdenes del Departamento de Estado y la CIA.
• Son grupúsculos neofascistas, que libran una guerra del miedo y el odio contra Revolución Bolivariana y su proyección continental, esa que pone en peligro sus estúpidos privilegios.

REDACCIÓN MAZO