Néstor Zabarce se fue con el "pájaro chogüí" a "cinco pa" las doce"



Publicado: 27/08/2015 08:35 AM

El 27 de agosto de 2010, a sus 74 años, Néstor Zabarce se fue “corriendo a abrazar a su mamá”, al fallecer en Caracas de un infarto, éste gran actor y músico venezolano nos dejó con sus “cinco pa’ las doce”.

Ídolo de la juventud venezolana en los años 60, se convirtió en el niño prodigio del cine venezolano, más adelante interpretaría temas que también lo consagrarían como el cantautor de las navidades de Venezuela y América.

Su carrera artística comenzó en 1949 cuando asistió, con tan sólo 12 años de edad y por iniciativa propia, al casting de la película La Balandra Isabel llegó esta tarde en 1950 en la cual obtuvo un papel estelar. Esa película dio a conocer a Zabarce en el mundo entero. Después de su primer trabajo entre grandes actores como Arturo de Córdova, Virginia Luque, Tomás Henríquez, Juana Sujo, Juan Corona, Aquiles Nazoa y el maestro Eduardo Serrano, ese mismo año el pequeño prodigio del cine fue contratado nuevamente, pero esta vez para protagonizar el film Amanecer a la Vida.

Luego, un poco más grande cursó estudios de artes escénicas, en Chile y Argentina. Durante los años 60 y 80 tuvo participación en varias telenovelas como Lucecita, Esmeralda, María Teresa, Peregrina y Una muchacha llamada milagros. Sus telenovelas, lo dieron a conocer ampliamente en varia partes del continente americano.

Zavarce fue un gran artista, incluso gracias al músico y compositor venezolano Oswaldo Oropeza, se descubrió su talento como cantante. En esta faceta es reconocido por la interpretación de El Pájaro Chogüí y Faltan cinco pa’ las doce, la canción que se convirtió en un himno para despedir el año e nuestro país.

Néstor Zabarce decidió apartarse de la vida artística en 1974 y durante sus últimos años vivió retirado en su casa de los Altos Mirandinos, en una vida humilde rodeado y cuidando árboles frutales, flores, pájaros y recibiendo a sus hijos y nietos.

Alguna vez antes de morir dijo: “Tengo mi vida feliz y he querido preservarla así, porque durante mi carrera artística me dediqué a lograr ciertos y determinados objetivos y los cumplí, pero el que nunca pude cumplir es el que ahora estoy haciendo realidad: el de vivir mi propia vida”.

   

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