Dialogo en México: Un camino de esperanzas para superar la crisis venezolana

"Un primer logro en esta batalla ha sido la firma del memorándum de entendimiento que estableció el método o ruta necesaria en la dinámica conversacional"
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Publicado: 06/10/2021 11:48 AM

En torno a las negociaciones que vienen realizando los representantes del gobierno legítimo de Nicolás Maduro y de la oposición política del país en la ciudad de México, con el apoyo neutral del gobierno de Andrés Manuel López Obrador y del Reino de Noruega, el pueblo abroga la esperanza de que se superen las diferencias políticas y minimicen los efectos de la profunda crisis económica inducida por el gobierno de los Estados Unidos y sus colaboradores como el  extinto Grupo de Lima junto a algunos países de la comunidad europea.

Un primer logro en esta batalla ha sido la firma del memorándum de entendimiento que estableció el método o ruta necesaria en la dinámica conversacional, más aun cuando se trata  de la defensa monolítica de la soberanía en el Esequibo, como rescate entre venezolanos del respeto a los mecanismos internacionales suscritos por la república.

Esta tarea, se enfoca al logro de un pacto definitivo o acuerdo general sobre temas de interés nacional, para generar la confianza en la opinión pública, en los negociadores y comunidad internacional, preparar el escenario para la convergencia política con sus elementos de diversidad, atendiendo a un reconocimiento en la urgente suspensión inmediata de las medidas coercitivas unilaterales, desbloqueo de recursos, abastecimiento de medicinas y alimentos, las cuales vienen siendo ejecutadas por el imperialismo, también lograr la celebración de elecciones sin saboteo, en beneficio de la sustentabilidad democrática real.

El pueblo de Venezuela aspirar que este proceso de negociación, con sus costes político para la dirigencia nacional culmine en acuerdos definitivos que permitan dinamizar la vida nacional y que no sea una nueva etapa de mentiras dominada por la injerencia imperial que siempre juega a patear la mesa cuando en ella se vislumbra acordar acciones en beneficio de la superación total de la crisis dentro del país.

Esperanzados que haya autonomía real en los representantes de la oposición política nacional y no sea una nueva perdida del tiempo por su limitada disposición a firmar  los acuerdos asumidos en la negociación como ocurrió en República Dominicana cuando se intentó avanzar en la solución de la problemática impuesta por el imperialismo a la economía venezolana.

El pueblo aspira a que se levanten las sanciones impuesta unilateralmente por EE.UU, donde la oposición política venezolana tiene alto grado de responsabilidad al implementar un manejo inadecuado, extra nacional para tratar de obtener el poder a costa de los sacrificios humanos que ha tenido que soportar todos los ciudadanos, quienes han visto amenazados incluso derechos irrenunciables de la nación como la independencia, la libertad, la soberanía, la inmunidad, la integridad territorial y la autodeterminación nacional.

La liberación de los recursos depositados en el Banco de Inglaterra y en otras entidades financieras en Europa y Estados Unidos, representarían también un importante paso al desenlace de la crisis inducida por el gobierno estadounidense en detrimento del pueblo venezolano, quien se mantiene en pie de lucha hasta lograr superar las imposiciones imperialistas que hasta ahora la comunidad internacional, salvo contadas excepciones de algunos países, no ha podido contrarrestar en el concierto de naciones mundiales o seno de organismos internacionales como lo explica la dinámica real.

Se aspira, que estas negociaciones aunque serán tocadas por turbulencias políticas e injerencias externas, conducidas por el eje del mal, del neoliberalismo y el imperialismo voraz estadounidense, por la prepotencia y sublevación internacional de gobiernos cipayos al dominio imperial de la administración actual estadounidense, culmine no solo el cerco y asfixia económica, financiera y comercial contra la República Bolivariana, sino que  se  asuma la capacidad, firmeza y fortaleza para condicionar, las acciones que hagan respetar los sagrados principios universales de soberanía y autodeterminación nacional, apoyados por la comunidad internacional que desea la tranquilidad para la dinamización económica regional.

RAFAEL SOSA VARGUILLA

@rafaeliginio

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