Publicado: 06/03/2024 09:00 PM

• En octubre de 1977, el diario El Globo destacó parte de la campaña psicológica que por radio, prensa y televisión se desató contra Jesús Márquez Finol “Motilón”, consistente en achacarle cuanto hecho violento ocurriera en el país.
• Todo ello con el fin de preparar la matriz para justificar la consumación de su asesinato, ocurrido el 1º de marzo de 1973.
• Sin embargo, los periodistas de sucesos no dejaron de destacar los detalles del ensañamiento con que se perpetró dicho crimen. Su cuerpo presentó 45 impactos de bala, varios de los cuales fueron en el cráneo. 
• Motilón fue cercado por 15 disipoles cuando estaba tendido sobre el pavimento. Poco podía defenderse ante un comando armado de esta naturaleza. Fue acribillado sobre una acera de la avenida Los Jabillos, cerca de la Andrés Bello.
• Esa persecución política se extendió, posteriormente, a sus familiares, quienes fueron amedrentados por los cuerpos policiales, durante la supuesta entrega del cadáver. El mismo fue secuestrado y el acto de inhumación dirigido por agentes del gobierno de Rafael Caldera.
• Los familiares fueron obligados a firmar el acta de entrega y, posteriormente, trasladados por una comisión del SIFA a La Carlota y después en avión de la FAV hasta la Villa del Rosario, en el estado Zulia.
• Ahí el cadáver secuestrado fue entregado a una comisión de la Guardia Nacional, que procedió al entierro bajo un extravagante despliegue de fuerzas en que participaron comandos integrados de la PTJ, SIFA, DISIP, Policía Municipal y Guardia Nacional. 
• Los testigos presenciales del acribillamiento desmintieron la versión oficial del Ministerio de la Defensa, según la cual hubo un enfrentamiento.
• La prensa del 03 de marzo de 1973 entrevistó a los testigos y vecinos, quienes señalaron que “el hombre, acribillado a balazos se bajó de un vehículo, caminó por la acera y cuando se encontraba a la altura de las Residencias Duna Palace, se detuvieron tres carros: dos Volkswagen y un Nova verde, de los cuales se bajaron 15 hombres armados de pistolas y ametralladoras.
• Entonces se oyeron gritos: ¡Acorrálalo!, ¡ahora mátalo! y de inmediato se sonaron numerosas ráfagas de ametralladoras. 
• Desde 1960 se había iniciado una persecución política contra Jesús Márquez Finol, cuando formaba parte del MIR. Ésta culminó con su aparatosa detención, el 1º de diciembre de 1966, cuando el gobierno de Raúl Leoni le abrió un expediente repleto de falsedades y de hechos en cuya autoría material e intelectual nunca participó.
• Hallándose el expediente en el Tribunal Supremo de Justicia, éste no pudo sentenciarlo por falta de pruebas. Pero durante el periodo de la declaración indagatoria fue sometido a grandes torturas.
• Durante los cinco años que duró en prisión fue trasladado a diferentes cárceles del país: Cuartel San Carlos, Cárcel Modelo y el Campo de Concentración Rafael Caldera. En esos años, tanto él como sus familiares, fueron objeto de múltiples vejámenes y humillaciones.

Contexto: 

• Bajo los términos de la Política de Pacificación de Rafael Caldera, ya operaba en Venezuela el siniestro terrorista Luis Posada Carriles, quien personalmente dirigió la jauría policial que ajustició a Márquez Finol, a plena la luz del día en la vía pública y a la vista de los presentes. 
• La versión oficial de los hechos trató de hacer creer que estaba armado. Testigos presenciales y vecinos aseguraron que solo llevaba un sobre en sus manos, el cual arrojó al jardín del edificio Duna Palace. Experticias posteriores demostraron que dicho paquete era contentivo de papeles relacionados con protestas estudiantiles.
• Márquez Finol nació el 14 de agosto de 1936; era hijo de Laura Rosa Final, costurera y Máximo Márquez, mecánico y chofer. Como estudiante del Liceo Simón Bolívar de San Cristóbal, se alzó contra la dictadura de Marcos Pérez Jiménez. Luego cursó estudios de Economía en La Universidad del Zulia (LUZ), a la par que se certificó como locutor de radio. Allí asumió la secretaría de AD, a la cual renunció para alistarse en las filas del MIR. 
• En 1963, subió a las montañas, al Frente Ezequiel Zamora, que se ubicaba en cerro El Bachiller, y posteriormente estuvo en el Frente Antonio José de Sucre. En Caracas fundó la célula urbana Nguyen Von Troi, en honor al revolucionario vietnamita fusilado por el ejército norteamericano el 15 de agosto de ese mismo año. 
• Estuvo casado con Gladys Azuaje, con quien conformó una familia. Producto de esa unión nacieron: María Luisa, Hildemar, José Manuel y Gladys Carolina.  
• Gracias a un delator, el 1º de diciembre 1966, fue allanado su apartamento y detenido junto a ocho personas ahí reunidas. Luego durante cinco años fue paseado por distintas cárceles en las peores condiciones de insalubridad. Participó de una espectacular fuga en el Hospital Militar y, desde entonces, el gobierno de Rafael Caldera desplegó una cacería sostenida y una campaña de desprestigio por todos los medios masivos de comunicación posibles para justificar su posterior ajusticiamiento. 
• En esos cinco años (1969-1974) del primer gobierno socialcristiano y siguiendo el mismo patrón de persecución, acecho, cerco y exterminio, fueron “pacificados”:  Ángel María Castillo (“Pancho Alegría”), Esladia Vázquez, Argelio Reyna, César Augusto Sánchez, Marvin Sánchez, Carlos Reina, Francisco Alberto Caricote Agreda, Plinio Iván Rodríguez Acosta, Álvaro Hernández, Aurelio Trocelt Calma, José Vitoria Gutiérrez y Pedro Manuel Centeno Gómez. 

REDACCIÓN MAZO