Será beatificado el insigne Óscar Arnulfo Romero, otra víctima de la CIA

Publicado: 22/05/2015 11:07 AM

La iglesia católica y el gobierno de El Salvador anunciaron que todo se encuentra listo para que este sábado 23 de mayo sea beatificado monseñor Oscar Arnulfo Romero, en una gigantesca ceremonia a la que se espera acudan unas 300,000 personas, tanto salvadoreños como delegados extranjeros.

Oscar Arnulfo Romero y Galdámez, nacido el 15 de agosto de 1917 en la empobrecida Ciudad Barrios de la provincia de San Miguel, al este de San Salvador, fue un constante luchador y defensor de los derechos humanos, abría las puertas de la Iglesia a los campesinos desplazados, condenaba la represión del ejército salvadoreño al inicio de la guerra civil en 1980-1982 entre el gobierno derechista y rebeldes de izquierda .Su voz fue callada ya que realizó denuncias sobre la violencia militar y lo asesinaron mientras oficiaba la Eucaristía en la Capilla del Hospital La Divina Providencia, al momento que preparaba la mesa para recibir el Cuerpo de Jesús.

Su lucha siempre fue en defensa de los más pobres y desprotegidos, en sus homilías siempre realizaba denuncias debido a los atropellos que sufrían los obreros, campesinos y de sus propios sacerdotes, pero sus principales conflictos comenzaron cuando mostro su marcada oposición en contra de los sectores económicos poderos de su país y de la estructura gubernamental que incitaba a la violencia en la sociedad del Salvador.

Durante los años 80 escribió una larga carta al presidente estadounidense Jimmy Carter, pidiéndole que cancelara toda ayuda militar. El domingo 23 de marzo de 1980 Mons. Romero pronunció su última homilía, la cual fue considerada como una sentencia de muerte debido a la fuerte denuncia que realizó. Murió a manos de un francotirador que formaba parte de los escuadrones de la muerte de ultraderecha, financiada por la Agencia Central Estadounidense (CIA).

 Fue enterrado el 30 de marzo y sus funerales fueron una manifestación popular de compañía por parte de sus queridos campesinos y obreros de la ciudad. A partir del 24 de marzo de 1990, dadas las valoraciones sobre las características de su vida y muerte, comenzó el camino hacia su beatificación, y luego de varios años se llevara a cabo este merecido acto a este grande de la historia que murió por llevar como bandera la defensa de los derechos de los que eran considerados los sin voz, es decir el pueblo.