Trump busca implosionar orden mundial multilateral emergente
Publicado: 23/08/2019 11:34 AM
El gobierno de los Estados Unidos, ha asumido un comportamiento contrainsurgente al nuevo orden multilateral, toda vez que se ha ido desligando de los acuerdos, pactos y convenciones válidamente en la comunidad internacional de protección de la humanidad, garantía en el mantenimiento de la paz, convivencia, gobernabilidad y cambio climático mundial.
En este sentido vemos que los acuerdos internacionales de protección ambiental, castigo a crímenes de lesa humanidad, mantenimiento de la paz, no han sido suscritos por EEUU, (Convención Internacional sobre los Derechos del Niño, Convenio de Kioto, el Pacto de París, Estatuto de la Corte Penal Internacional); y de los que formaba parte los ha denunciado, renunciando a su estadía en la UNESCO, Acuerdo Nuclear con IRAN y más recientemente del Acuerdo Nuclear con Rusia sobre la regulación de armas (misiles) de corto y mediano alcance que son letales para la humanidad.
Con esta conducta el gobierno estadounidense y fundamentalmente la presidente Donald Trump, se convierte en el principal actor contrainsurgente del nuevo orden internacional multilateral o pluripolar, que esta aniquilando el modelo unipolar plenipotenciario e imperialista hegemónico imperante desde 1945, luego de la Segunda Guerra Mundial y los acuerdos capitalistas neoliberales de Bretton Woods.
Al no ser parte de estos acuerdos como el Tratado de Fuerzas Nucleares de Rango Intermedio(INF), Trump ha autorizado realizar pruebas misilisticas y promocionarlas a través de las grandes cadenas multinacionales de la información quizás para exhibir no solo su poderío militar sino su arrogancia, impunidad y destreza de hacer cuanto se le venga en ganas en cualquier parte del mundo.
Su accionar se ha constituido en una táctica dirigida a fustigar los gobiernos de la Federación Rusa y de la República Popular China, principales potencian encargadas de dar equilibrio mundial al poderío estadounidense, pretendiendo obligar en un escenario de negociación que estas potencias euroasiáticas no realicen acciones de cooperación comercial o militar en el continente americano que en otrora los gringos habían considerado su patio trasero impenetrable por potencias extra continentales.
Sin embargo hasta los países más aliados del imperialismo yanqui hoy están realizando acciones de cooperación bilateral con Rusia y China, marcando su desobediencia al gobierno de EEUU, quien evidentemente no ve con buenos ojos este tipo de relacionamiento, que les quita el control total para seguir asfixiando a las economías periféricas dependientes financiera y comercialmente de organismos multilaterales controlados por el capitalismo occidental.
La arremetida yanqui la describe lo que hoy ocurre en las economías y gobiernos progresistas de Nicaragua, Cuba y fundamentalmente de Venezuela, donde han decretado bloqueos navales- militares para rescatar el control hegemónico perdido como consecuencia del despertar de los pueblos y de la diplomacia bolivariana impulsada por el Comandante Hugo Chávez hoy apoyada comercial y militarmente por la cooperación de los gobiernos de China y Rusia.
Con sus acciones el imperialismo, buscan mostrar su capacidad técnica militar de sometimiento a los demás países, sin reconocer que las realidades actuales no son las de 1945, donde pudieron convertir a los países europeos occidentales en seguidores obedientes de sus políticas dominados por préstamos de reconstrucción como el Plan Marshall aplicado para el resurgimiento de escenarios desbastados por la guerra.
Hoy los gobiernos de los países euroasiáticos liderados por Xi Jinping y Vladimir Putín, connotados estadistas en la política internacional, cuentan con capacidades técnicas, militares y comerciales para hacer frente a la insensatez estadounidense y al comportamiento psicótico del presidente Trump en su afán de conducir a la humanidad a un enfrentamiento bélico catastrófico universal.
RAFAEL SOSA VARGUILLA
@rafaeliginio